Nuevamente me encuentro retomando mi jornada laboral, quiero compartir con ustedes este post que lo titulé “Pánico Morado”, lo nombré así por algo que me sucedió, pero, me gustaría decirles el porqué del nombre de “Pánico Morado”, “pánico” es aquel sentimiento de espanto, temor o nervio ante algo desconocido, y “morado” se le llama a los jugadores del futbol y aficionados a un equipo de mi país llamado Deportivo Saprissa.
Luego de explicarles mi título, les contaré lo que ocurrió ayer al ser alrededor de las 10:15 a.m., donde me encontraba en el supermercado Automercado, Plaza Herradura (Playa Herradura, Puntarenas, Costa Rica), estaba buscando un bloqueador solar y unas sandalias, cuando me dirigí a la caja para pagar mi cuenta, me dijo mi mamá “Paguemos en esta caja detrás de este…” , en la forma que me lo dijo, fue sarcásticamente, como si me quisiera bromear o previéndome de algo, y efectivamente fue así, porque cuando alcé la mirada logré ver a Walter Centeno, mi jugador de futbol favorito, de quien me enamoré “platónicamente” y perdidamente en el 2002, al verlo le dije a mi mamá “No gracias…” e inmediatamente me cambié de caja.
¿Podrían creerlo que me dio un pánico morado al verlo frente a mí? Me llenaron los nervios y la manera de reaccionar fue retirándome de donde él estaba para irme a otro lugar para sentirme más segura ¡qué ingenuidad! Como si él supiera que me gustaba.
Con respecto a esto, quiero compartir algo que he estado pensando una idea me ha dado vueltas en la cabeza una y otra vez, ya que siento que escribir tiene un cierto poder místico, o algo por el estilo, porque no es la primera vez que escribo algo y se cumple de una u otra manera, sea a mí, o personas que conozco, ejemplo de ello, es lo que me sucedió el domingo, y lo relaciono con los dos fragmentos pertenecientes son de la novela “Más que cualquier cosa…son ángeles destrozados” (More tan anything…they´re broken angels) que estoy escribiendo, y que cito seguidamente:
Capítulo: “Vete”
“…luego se fue al supermercado, ya que necesitaba alimento (…) Giovanna estaba en la caja cuando ve a Taylor, se pone nerviosa, ya que no podía disimular que su presencia le afectaba, menos después de aquella noche, ella hacía la fila de costumbre, y detrás se puso él (…) esa acción causó que sus mejillas se ruborizaran, mientras ella continuó con su rumbo”
Capítulo: “Contigo en tus sueños”
“Cuando él tenía seis meses de nacido, Giovanna decidió ir con él a un pequeño viaje de descanso a uno de los hoteles de playa, además ir con su hermana, por esta razón, los tres se fueron al supermercado para comprar algunas cosas que requerían para ir bien equipados, Giovanna sentó a su hijo en el asiento para bebés en la parte trasera del carro, mientras Sophia aborda el vehículo, y luego la mujer conduce hasta el centro de comercio (…) mientras buscaba un bloqueador de sol con el factor de protección solar adecuado para su hijo, chocó accidentalmente con otra persona, ella se dio la vuelta muy avergonzada por lo sucedido, y disculpándose inmediatamente se dio cuenta que conocía aquella persona, era Ariadna, Giovanna se notó muy nerviosa, su corazón comenzó a latir fuertemente y se le encogió de solamente pensar que posiblemente Taylor andaba allí (…) Kevin le ayudó en llevar sus cosas a la caja y canceló lo que ella había comprado, Sophia le ayudó con los bolsos mientras tenía al bebé entre sus brazos, ella antes de irse volvió su rostro a Taylor y notó que éste no le quitaba la mirada de encima de su hijo”
¿Lo notaron? Pues sí, esto me tiene muy intrigada, y más que intrigada me da risa y curiosidad, porque ahora que lo recuerdo, en el 2002, mi mejor amiga del colegio, Martha, me pidió que le escribiera una fanfic (fanfic, es cuando alguien escribe una “novela” sobre quien admira) sobre Walter, Tuma, ella y yo, es increíble porque recuerdo un poco lo que escribí en ella y hay una parte el Presidente del Club nos había dado una membrecía para asistir a todos los partidos del equipo, y en mi vida real, cuando Walter estaba jugando con el AEK de Atenas, Grecia, yo me había hecho amiga de quien lo reemplazo en ese momento Marco “Marquinho” Cardozo, quien me regaló una membresía para ir a verlo. Créanlo o no! Eso me pasó, y no puedo encontrar una razón lógica a lo que pasó.
Espero que hayan disfrutado, mi post, y si alguno tiene algo que comentar, bienvenido sea!
Muchos besos, abrazos, y bendiciones,
Taivas Enkeli
Luego de explicarles mi título, les contaré lo que ocurrió ayer al ser alrededor de las 10:15 a.m., donde me encontraba en el supermercado Automercado, Plaza Herradura (Playa Herradura, Puntarenas, Costa Rica), estaba buscando un bloqueador solar y unas sandalias, cuando me dirigí a la caja para pagar mi cuenta, me dijo mi mamá “Paguemos en esta caja detrás de este…” , en la forma que me lo dijo, fue sarcásticamente, como si me quisiera bromear o previéndome de algo, y efectivamente fue así, porque cuando alcé la mirada logré ver a Walter Centeno, mi jugador de futbol favorito, de quien me enamoré “platónicamente” y perdidamente en el 2002, al verlo le dije a mi mamá “No gracias…” e inmediatamente me cambié de caja.
¿Podrían creerlo que me dio un pánico morado al verlo frente a mí? Me llenaron los nervios y la manera de reaccionar fue retirándome de donde él estaba para irme a otro lugar para sentirme más segura ¡qué ingenuidad! Como si él supiera que me gustaba.
Con respecto a esto, quiero compartir algo que he estado pensando una idea me ha dado vueltas en la cabeza una y otra vez, ya que siento que escribir tiene un cierto poder místico, o algo por el estilo, porque no es la primera vez que escribo algo y se cumple de una u otra manera, sea a mí, o personas que conozco, ejemplo de ello, es lo que me sucedió el domingo, y lo relaciono con los dos fragmentos pertenecientes son de la novela “Más que cualquier cosa…son ángeles destrozados” (More tan anything…they´re broken angels) que estoy escribiendo, y que cito seguidamente:
Capítulo: “Vete”
“…luego se fue al supermercado, ya que necesitaba alimento (…) Giovanna estaba en la caja cuando ve a Taylor, se pone nerviosa, ya que no podía disimular que su presencia le afectaba, menos después de aquella noche, ella hacía la fila de costumbre, y detrás se puso él (…) esa acción causó que sus mejillas se ruborizaran, mientras ella continuó con su rumbo”
Capítulo: “Contigo en tus sueños”
“Cuando él tenía seis meses de nacido, Giovanna decidió ir con él a un pequeño viaje de descanso a uno de los hoteles de playa, además ir con su hermana, por esta razón, los tres se fueron al supermercado para comprar algunas cosas que requerían para ir bien equipados, Giovanna sentó a su hijo en el asiento para bebés en la parte trasera del carro, mientras Sophia aborda el vehículo, y luego la mujer conduce hasta el centro de comercio (…) mientras buscaba un bloqueador de sol con el factor de protección solar adecuado para su hijo, chocó accidentalmente con otra persona, ella se dio la vuelta muy avergonzada por lo sucedido, y disculpándose inmediatamente se dio cuenta que conocía aquella persona, era Ariadna, Giovanna se notó muy nerviosa, su corazón comenzó a latir fuertemente y se le encogió de solamente pensar que posiblemente Taylor andaba allí (…) Kevin le ayudó en llevar sus cosas a la caja y canceló lo que ella había comprado, Sophia le ayudó con los bolsos mientras tenía al bebé entre sus brazos, ella antes de irse volvió su rostro a Taylor y notó que éste no le quitaba la mirada de encima de su hijo”
¿Lo notaron? Pues sí, esto me tiene muy intrigada, y más que intrigada me da risa y curiosidad, porque ahora que lo recuerdo, en el 2002, mi mejor amiga del colegio, Martha, me pidió que le escribiera una fanfic (fanfic, es cuando alguien escribe una “novela” sobre quien admira) sobre Walter, Tuma, ella y yo, es increíble porque recuerdo un poco lo que escribí en ella y hay una parte el Presidente del Club nos había dado una membrecía para asistir a todos los partidos del equipo, y en mi vida real, cuando Walter estaba jugando con el AEK de Atenas, Grecia, yo me había hecho amiga de quien lo reemplazo en ese momento Marco “Marquinho” Cardozo, quien me regaló una membresía para ir a verlo. Créanlo o no! Eso me pasó, y no puedo encontrar una razón lógica a lo que pasó.
Espero que hayan disfrutado, mi post, y si alguno tiene algo que comentar, bienvenido sea!
Muchos besos, abrazos, y bendiciones,
Taivas Enkeli
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